Pero mejor vayamos por el principio: Hrubesch ante la ausencia de Marin (lesión) y Dejagah (sanción) decidió alterar el sistema táctico de su equipo y dispuso un 4-1-4-1 sobre el campo: Neuer en Porteria; La habitual Defensa compuesta por Beck, Boateng, Höwedes y Boenisch; en el centro de campo incorporó a un trivote por el medio con Hummels haciendo las funciones defensivas con Khedira y Castro por delante. Jhonson ocuparía la derecha y Özil a a la izquierda, posición más cómoda para él pues es la que habitualmente ocupa en el Werder cuando juega con Diego. En punta, en un principio de referencia, el espigado Sandro Wagner.
Tras unos primeros minutos donde Inglaterra llevó la voz cantante, se pudo ver que el combinado teutón ejercia cada vez una mayor presión y que se iba desplegando en ataque con unas contras muy peligrosas. Tras el primer cuarto de hora, iba a ser precisamente esa la tónica con la que se iba a desarrollar todo el partido: Inglaterra atrapada en un quiero y no puedo, con el aliento de los alemanes pegado en el cogote, mientras estos tras robar el balón salian disparados hacia la portería inglesa. Así llegaría el primer gol alemán: balón perdido por los ingleses en la medular, el esférico llega a Özil que se inventa un pase entre lineas para que Castro se adelante a todos los defensores y haga infructuosa la salida del portero.
Destacar sobre manera el juego desplegado por el trivote del medio campo: Hummels estuvo perfecto en su posición de medio centro ayudando en numerosas ocasiones a la pareja de centrales cuando la situación lo requería. No se le notó para nada su inactividad y aunque normalmente ocupa la demarcación de central en el BVB, el pivote es una posicion que conoce pues jugaba precisamente de medio centro en los escalafones inferiores del Bayern. Por delante de Hummels la pareja Khedira-Castro parecían estar por todos lados, en defensa, en ataque, con balón, sin balón... Especialmente me gustó el trabajo del capitán Khedira al que le vi robar un incontable número de pelotas y gracias a su físico llegar siempre desde atrás con mucho peligro. Aqui estuvo una de las dos claves del partido: Hrubesch alteró la táctica del equipo reforzando el centro de campo y con ello desbarató los planes del equipo inglés que se vió sin ideas en la faceta ofensiva.
Y cómo no? destacar al MVP del partido y la otra clave del partido: Mesut Özil. Como dijimos anteriormente, veniamos demandando que asumiera la responsabilidad que por su calidad debe tomar en los partidos. Y ayer lo hizo. Tras la asistencia del primer gol, cogió confianza y se le veía que pedía la pelota con insistencia. Ya en la segunda parte se decidió a lanzar una falta lejana directa a porteria. El balón fué fuerte, pero el portero cometió un tremendo error y el disparo cogió a Loach a contrapie y le dobló la mano. El partido ya estaba decidido. Los ingleses se aferraron a las jugadas a balón parado, y en otra contra Özil asistió a Wagner para que marcara el 3-0. El posterior 4-0 también del jugador del Duisburg hizo estallar la fiesta del combinado alemán.
En resumen, la selección sub-21 se hizo con el título gracias a un gran trabajo defensivo (sólo un gol en contra en todo el campeonato) y de saber superar el handicap inicial de parecer una selección parcheada resultando un equipo de futbol y no un mero cumulo de jugadores.Grandísimo trabajo el del seleccionador Horst Hrubesch y destacar una hornada de muy buenos futbolistas a los que Joachim Löw deberá dar paso a medio o incluso corto plazo en la selección absoluta. Pues uno de los problemas de los que adolece la Nationalmannschaft es el de la endeblez defensiva, caracteristica por la que ha sobresalido esta sub-21 y varios de sus integrantes.
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen